Nanoespirales

Muchas veces me preguntan si algún día se me acabaran los temas a desarrollar en el blog.

Error, creo que no me va a alcanzar la vida para volcar todo lo que he visto y aprendido en mi corta vida. Lo mas importante, es que día a día, se van agregando nuevos conocimientos y cuanto mas nos internamos en esa magia, mas fuerza cobra esa necesidad de saber mas.

Hay tesoros en la vida muy importantes y creo uno de ellos es el conocimiento. En el pasado adquirirlo era muy difícil, pero en la actualidad esta al alcance de la mano.
Como siempre digo es muy difícil saber diferenciar realidad de ficción y focalizarse en algo cuando tenemos tantas distracciones, pero les aseguro que no hay nada más apasionante que introducirse en una aventura en donde nuestra imaginación es el personaje principal y depende de ella crear el mundo que la rodea.

Al margen que mis bibliotecas contienen mas de 700 libros, muy pocos pertenecen a la ficción, ya que mi gusto por la historia y los enigmas ha marcado mi lectura desde pequeño. Por ello el acceso y la consulta son constantes, refrescando los conocimientos como el primer día.
Pero lo mejor, es que uno con el pasar de los años y sumada la experiencia, hace que ese conocimiento sea asimilado de otra manera o perspectiva. Así, miles de fenómenos y situaciones que tal vez parecían inexplicables, comienzan a tener una luz que nos aclara el panorama.

Eso sucedió en 1992, cuando un grupo de geólogos rusos se encontraba realizando un trabajo de campo en los Montes Urales, mas específicamente en Narda Creek.

La idea de la investigación era hallar un yacimiento que contenga piedras preciosas, pero al excavar en varias capas de entre 20.000 y 320.000 años descubrieron unos minúsculos objetos desconocidos que parecían de fabricación artificial.
Ya en los laboratorios del “Instituto de Investigación Geológica de metales nobles” situado en Moscú, el examen fue más exhaustivo y se determinó que estos objetos de 3 cm de largo y 0,003 mm de diámetro, era pequeños espirales que solo podían apreciarse en un microscopio electrónico.

Su composición era en mayoría de Cobre y otras tantas de una mezcla entre el Molibdeno (http://es.wikipedia.org/wiki/Molibdeno) y Volframio (http://es.wikipedia.org/wiki/Wolframio), presentando diminutos orificios en toda su superficie.

En la actualidad podemos apreciar este tipo de tecnología en la informática (campo en el que me desempeño) con los microprocesadores, medicina con nanocirugías y otros tantos.

¿Pero que sucede cuando al corroborar con carbono 14, determinamos que el objeto hallado tiene entre 100.000 y 300.000 años?

Obviamente los ufólogos toman esto como prueba irrefutable de presencia extraterrestre en el pasado, pero de ser así tendríamos que hacer lo mismo con los relatos fantásticos de Julio Verne, H G Wells, etc.

Lo más llamativo de esta nanotecnología son las proporciones perfectas, que de no usarse tecnología actual para fabricarlas, debería ser imposible lograr tal precisión.
Para que entiendan a grandes rasgos, la nanotecnología es el desarrollo y la aplicación práctica de estructuras y sistemas en una escala nanométrica (entre 1 y 100 nanómetros).

El ejemplo que mas se acerca, es el de los transistores (dispositivos electrónicos semiconductores, etc.). Debido al avance de la nanotecnología se ha garantizado que cada 18 meses se puede duplicar el número de los mismos en los microprocesadores.

Ya en 1995 Valerie Uvarov (afamado Ufólogo) y Elena Vatveyeva junto a otros geólogos rusos, visitaron el lugar en busca de nuevas pruebas, obteniendo resultados increíbles. Las muestras fueron enviadas a la “Academia Rusa de Ciencias de Syktyvka”, el “Instituto de Helsinki” en Finlandia y el ya citado centro geológico de Moscú.

Dentro de ellas se destacaban 2: una de 3 cm de largo (compuesta íntegramente de Cobre puro) y con un espesor de 0.08 milímetros, que luego de exhaustivos estudios, y lograr fotografías con la ayuda de microscópicos electrónicos de ultima generación, llegaron a la conclusión que tal tecnología no ha podido ser creadas de una forma natural, debido a su increíble precisión.
La otra muestra estaba compuesta de Volframio y Molibdeno y poseía una capa vítrea (que se produce debido a una exposición a altas temperaturas).

Otro dato por mas relevante, es que las espirales fueron elaboradas siguiendo el patrón de la Relación Áurea, basadas en el número Phi, como se observa en algunas construcciones sagradas (pirámide de Keops, el Partenón de Atenas, etc.)
Lo más llamativo fue cuando los objetos fuero expuestos a lentes de mas de 100 aumentos. Los científicos aseguraron que podía tratarse de solenoides (bobina de alambre enrollado, en forma de cilindro alargado que al transportar una corriente eléctrica se asemeja a un imán de modo que un núcleo móvil es atraído a la bobina cuando fluye una corriente, transformando la energía eléctrica en una energía mecánica)

Miles de hipótesis rodearon el caso, desde guerras extraterrestres, hasta viajes en el tiempo. La realidad es que se hace imposible obtener información sobre este tema y mis únicas dos fuentes son libros que compilan la información básica que la he visto pegada en varias paginas.

Al margen de las miles de teorías y conjeturas alocadas, podemos llegar a la conclusión que el conocimiento y la técnica requerida para la fabricación de nanotecnología nació hace solo 40 años en laboratorios militares, haciendo imposible su presencia en objetos con mas de 100.000 años de antigüedad.